Durante la pandemia el confinamiento y las dificultades para viajar desde otros países o para desplazarse por el territorio español hicieron al Camino inaccesible, pero, además, las restricciones hicieron imposibles muchas de las principales tradiciones y rituales de la peregrinación a Compostela: la hospitalidad, las cenas comunitarias… Y también la acogida tradicional que el Hostal de los Reyes Católicos – hotel de cinco estrellas de la red de Paradores de Turismo- ofrece a los diez primeros peregrinos que llegan a Santiago cada día.

Afortunadamente el Hostal de los Reyes Católicos ha recuperado su tradición y nosotros queremos recordarla y difundirla entre todos los peregrinos. La tradición es la siguiente: el Hostal de los Reyes Católicos ofrece una comida gratis a los diez primeros peregrinos que llegan a Compostela. Para disfrutar de este obsequio los peregrinos deben pasar por la Oficina de Acogida al Peregrino, que es la encargada de certificar que se trata de los diez  primeros llegados esa mañana. La Oficina del Peregrino otorga tickets o justificantes a los  peregrinos con los que podrán acceder a la comida, servida en uno de los restaurantes del Hostal de los Reyes Católicos a las 13:00h.

¿Por qué existe una tradición semejante en uno de los hoteles más lujosos de la ciudad? La razón es clara y de mucho peso: el origen del edificio. El actual hotel-parador fue construido en las primeras décadas del siglo XVI como hospital de peregrinos, convirtiéndose en uno de los principales de la Cristiandad. En él los peregrinos encontraban cobijo, comida y atención sanitaria durante tres días.

La construcción de un hospital de peregrinos semejante fue sufragada por los Reyes Católicos, Isabel y Fernando. Con esta fundación, los reyes querían agradecer al Apóstol sus triunfos militares, particularmente la reciente toma de la ciudad de Granada (1492) para la que, anteriormente, habían pedido ayuda a Santiago peregrinando y permaneciendo en la ciudad en oración durante varios días.