Santa María de Vilar de Donas es quizás uno de los espacios más secretos y hermosos del Camino. Situado en las inmediaciones de Palas do Rei, vale la pena desviarse los cientos de metros que lo separan del Camino para visitar el tesoro que conserva: un ciclo de pinturas al fresco que, tras décadas bajo el riesgo de desaparecer a causa de su fragilidad y las condiciones de humedad de la zona donde se alza, acaban de ser restauradas con un excelente resultado.

Vilar de Donas fue un priorato de la Orden de Santiago, dependiente de la su casa central en el Camino de Santiago: San Marcos de León. Aunque su arquitectura también merece una visita, pues se trata de una joya del románico, las pinturas constituyen un raro tesoro que ningún peregrino o turista debería perderse. Se trata de un ciclo de pinturas gótico, ejecutado por un taller del llamado gótico internacional, un estilo artístico refinado y cortesano que floreció a comienzos del s. XV y que llegó a Galicia muy puntualmente.

Los frescos poseen numerosas inscripciones que han permitido fecharlos en 1434, un Año Santo en el que Compostela recibió a miles de peregrinos llegados desde todos los rincones de Europa, por tierra y por mar, en numerosos barcos procedentes de las Islas Británicas y los Países Escandinavos. Vemos así que los años santos, entonces como hoy, eran ya tiempos de obras e inversiones, nada nuevo bajo el sol, tampoco el marketing y las inversiones en arte que sus beneficios permiten.

Las pinturas ocupan fundamentalmente la superficie del ábside central y un baldaquino, igualmente gótico. En el ciclo del ábside destaca, en el registro inferior, la imagen de Cristo Varón de Dores, rodeada por pinturas de los reyes Juan II y María de Aragón y su hijo Henrique; en el nivel superior los protagonistas son las imágenes de la Virgen María y el arcángel san Gabriel, que conforman una hermosa Anunciación dispuesta en torno al ventanal que ilumina el altar mayor.

Junto al ciclo pictórico debemos destacar la existencia de varios sepulcros de caballeros de la Orden de Santiago de gran valor artístico, entre ellos el de Fernando Ares Noguerol.

La iglesia puede ser visitada entre 12-18,40h de martes a domingo hasta el 15 de octubre.