El Códice Calixtino (Codex Calixtinus) es una extraordinaria compilación conformada por documentos, partituras y miniaturas de gran valor, un compendio de la cultura jacobea, de la historia del Apóstol Santiago, su culto y peregrinación. En palabras de Klaus Herbers, se trataría de un dossier hagiográfico, una fuente concebida para la difusión y promoción del culto a Santiago de forma muy novedosa.

Entre los especialistas el códice suele ser denominado como Liber Sancti Iacobi -literalmente Libro de Santiago-, pero popularmente suele denominarse como Códice Calixtino (Codex Calixtinus), en referencia al papa Calixto II (1119-1124), quien figura como autor de varios de los textos compilados que, falsos o no, otorgaron en su tiempo legitimidad papal al manuscrito y a sus contenidos.

La fecha más probable de la redacción del Códice Calixtino es mediados del siglo XII, si bien algunas de sus partes podrían haber sido redactadas en un momento anterior. Lo cierto es que la idea parece provenir de unas décadas antes, como apuntó Díaz y Díaz, el proyecto debió ser concebido en el scriptorium de la catedral de Santiago durante el arzobispado de Diego Gelmírez (1068-1140), quien puso también en marcha otra gran empresa: la Historia Compostelana, una historia de la diócesis de gran valor.

Lo más extraordinario es que, a pesar de haber sufrido diversas peripecias, el manuscrito ha llegado hasta nosotros de forma íntegra, con todos sus contenidos y una organización en cinco libros más una adenda o anexo. Actualmente, como a lo largo de los siglos pasados, el códice se conserva en el Archivo de la Catedral de Santiago, existiendo además copias más o menos parciales en diversos archivos y bibliotecas de Europa, algunas de ellas también de origen medieval.

Durante la Edad Media, era frecuente la escritura e iluminación de códices sobre la vida de los santos o patronos de ciertas iglesias, particularmente centros de peregrinación que buscaban propagar su culto. En los siglos XI y XII hay numerosos ejemplos, como los dedicados a Santa Fe de Conques o a St. Gilles de Arles, pero se trata de obras muy diferentes a la que nos ocupa, en tanto eran fundamentalmente biografías de santos, centradas en sus vidas y milagros, mientras que el Códice Calixtino va mucho más allá.

Queremos dedicar una serie de post a introducir este magnífico manuscrito y sus contenidos, acercaros a sus cinco libros: el Libro I dedicado a la liturgia y a la música en honor al apóstol Santiago; el Libro II, conocido como libro de los milagros, que recoger 22 atribuidos al apóstol; el Libro III que aporta diversos documentos sobre la historia y Traslación de las reliquias de Santiago a Compostela; el Libro IV, conocido como “Pseudo Turpín”, dedicado a la relación de Carlomagno y sus campañas con la peregrinación a Compostela; y el Libro V, conocido como “Guía del peregrino”, que constituye verdaderamente un ejemplo extraordinario de guía para el peregrino medieval.

Pero no sólo nos interesa introducir sus contenidos, también queremos abordar sus miniaturas, introducir las copias existentes en otros archivos de España u otros países, la importancia y el papel que tuvieron en la difusión de su culto… Y, ciertamente, recordar también las peripecias vividas durante estos siglos, entre ellas un reciente robo -afortunadamente con final feliz- que nos permitirá retomar un viejo género medieval: los furta sacra (robos sagrados).

Os invitamos a acompañarnos en este viaje extraordinario…